Miles de religiones
existen en el mundo hoy día, pero ¿cuál es la verdadera religión? ¿Cómo puede
alguien saber si alguna religión es mejor que otra o si alguna religión
particular es la verdadera? Saber cuál
es la religión verdadera implica conocer la definición de la palabra misma; no
obstante definir qué es religión ha sido y es motivo de controversia.
Por un lado hay
quienes la definen como:
Las doctrinas constituidas por
un conjunto de principios, creencias y prácticas en torno a cuestiones de tipo
existencial, moral y sobrenatural, por lo general basadas en textos de carácter
sagrado, que unen a sus seguidores en una misma comunidad moral.
Por otro lado lo
definen como:
El vínculo de piedad por el que
el hombre está religado a Dios, o la
sincera relación con Dios mediante el vínculo de la piedad. Religión
sería la forma de religar al hombre con Dios y, por parte del hombre, de sentirse
criatura dependiente del Dios Creador.
El pensamiento común
es el de un sistema religioso centrado en un conjunto particular de creencias y
prácticas requeridas dentro de la religión. Por ejemplo, el Islam tiene cinco
pilares esenciales que debe ponerse en práctica entre todos los musulmanes. El
budismo incluye las 4 verdades nobles y el camino óctuple. El judaísmo sigue la ley de Moisés
escrita en la Torá. Esta forma de pensamiento tiene la dificultad de que no
logra superar las exigencias de Dios, por lo que ningún nivel de obras puede
hacer que una persona sea lo suficientemente buena como para alcanzar la
eternidad con Dios en el cielo (Efesios 2:8-9). De hecho, la Escritura afirma
que todos han pecado y están destituidos de la gloria de Dios (Romanos 3:23).
El merecido castigo por el pecado humano es la separación eterna de Dios o la
muerte eterna (Romanos 6:23).
Aún cuando el
cristianismo tiene un sistema de creencias religiosas único no se fundamenta en
rituales, prácticas sino más bien en una relación. En el cristianismo bíblico,
la única solución al problema del pecado se encuentra en Jesucristo. Como Dios
perfecto y hombre perfecto, vino a la tierra para ofrecer Su propia vida como un sustituto por nosotros, a causa de nuestro pecado. (Romanos 5:8). Es decir, Cristo tomó la iniciativa de
venir al mundo en la forma del Hijo de Dios, Jesucristo, para pagar el precio
por nuestros pecados. Jesucristo murió en nuestro lugar cuando Él fue
crucificado en la cruz. Cristo tomó el
castigo en Sí mismo en nuestro lugar. “Al que no conoció pecado, por nosotros
lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en Él.” (2
Corintios 5:21).
Como resultado de
esa obra sustitutiva, si confesamos que Jesús es el Señor y creemos que Dios lo
resucitó de entre los muertos, seremos salvos (Romanos 10:9). Por el don de la
gracia de Dios somos salvos del pecado por medio de la fe en Jesús (Efesios 2:8).
El resultado es el perdón del pecado (Hechos 10:43) y la vida eterna (Juan
3:16).
Sin una relación con
Jesucristo por medio de la fe, la religión es insuficiente para hacernos justos
ante Dios. En cambio, recibimos a Jesús por fe (Juan 1:14) y nos convertimos en
hijos de Dios. Como resultado de nuestras vidas transformadas, le servimos a Él
y a otros como un acto espiritual de adoración (Romanos 12: 1-2). La verdadera
religión incluye la forma en que vivimos (Santiago 1:27), pero implica más de
un conjunto de reglas o rituales.
¿Ha buscado
conectarse con lo divino y sobrenatural, explicar el sentido de la vida, o
satisfacción espiritual para superar el sufrimiento y alcanzar la felicidad,
basado en la observancia escrupulosa del culto y las obras, en lugar de una
relación con Jesús? Si es así, has
tomado el camino equivocado y vas directo hacia tu propia destrucción.
Hoy mismo te desafió a reconocer que eres un pecador, y que necesitas la ayuda y el perdón de Dios; por lo tanto arrepiéntete de tus pecados y deposita tu confianza en el Señor Jesús. Te invito a entrar por el camino de una verdadera relación con Dios y tendrás vida eterna. "Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado." Juan 17:3.
Hoy mismo te desafió a reconocer que eres un pecador, y que necesitas la ayuda y el perdón de Dios; por lo tanto arrepiéntete de tus pecados y deposita tu confianza en el Señor Jesús. Te invito a entrar por el camino de una verdadera relación con Dios y tendrás vida eterna. "Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado." Juan 17:3.
Publicar un comentario