[right-side]
"Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios. No es por obras, para que nadie se gloríe. Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para hacer las buenas obras que Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas". Efesios 2:8-10.
A través de la historia y de los años los consejos, escritos, mensajes, y palabras de muchos hombres de Dios han perdurado y han sido de influencia para la vida de generaciones siguientes. Estos mensajes han perdurado porque ellos le dieron prioridad a las cosas de valor eterno en lugar de las cosas pasajeras de este mundo.
Lamentablemente, muchas personas escogen una existencia sin ningún significado perdurable. Ellos salen cada día a conseguir tanto dinero como sea posible, a complacerse a si mismos, y retirarse a disfrutar de la buena vida pagana. La verdadera vida, que realmente vale la pena vivir, consiste en entregarse sin reservas a Dios, para que Él nos pueda usar de la manera que a Él le parezca adecuada. Cristianos como Clemente, Policarpo, Irineo, Ignacio, Justino mártir y tantos otros que hicieron un impacto duradero en su esfera de influencia, tuvieron una pasión por servir al Señor. Buscaron maneras de expresar su amor y devoción a Él.
Como ciudadanos de un reino celestial, los creyentes debemos acudir a nuestros puestos de trabajo como "siervos del Dios todopoderoso". Tal vez usted esté pensando, que tiene un trabajo secular o que su vida no es de mucha importancia. Amigo, hermano, si usted está decidido a encontrar la manera de ser útil para el reino, Dios le proveerá de las tareas que son de valor eterno. Sea sensible hacia las almas que no conocen a Cristo. Comparta su fe con los que sufren. Ya sea a través de su vocación o en su comunidad, esté disponible para las personas que necesitan ayuda. Dígale a otros lo que el Señor está haciendo en su vida.
Estamos llamados a servir a Dios donde nos encontremos. A todos nos ha sido dado el trabajo de evangelistas y maestros, (Mateo 28:19), así como la tarea de cuidar a los que están en necesidad . (Isaías 1:17; Gálatas 6:2). Hay mucho trabajo por hacer.
Publicar un comentario